300 toneladas que evitarán, por ejemplo, las emisiones y contaminación que producen 980 vehículos y 16 autobuses en la isla. Ahora solo falta desplegar la infraestructura necesaria para cumplir los objetivos para el uso de esta energía, como cuenta Anton Martínez, director Enagás renovable y Servicios: "Se utilizará en diversas partes de la economía balear como movilidad, generación de electricidad y calor". El hidrógeno verde podrá ser inyectado en la red de gas natural, para que llegue a la industria o al sector hotelero.
Además, el hidrógeno se almacenará y distribuirá en las llamadas hidrogeneras, puntos de repostaje para autobuses públicos o para la flota de coches de alquiler que se mueven en la isla.
El proceso para la fabricación del hidrógeno es el siguiente: la energía solar generada con las placas fotovoltaicas servirá para someter el agua almacenada en un tanque a un electrolizador, que es el que rompe la molécula del agua y crea el hidrógeno renovable.
Un proceso que contribuirá a frenar la importante dependencia energética de las Islas Baleares, según explica Belén Linares, directora de innovación de Acciona Energía, que apunta que esta "es una tecnología perfecta para descarbonizar la isla". Además, añade, "ha posicionado a España como el ejemplo a seguir en todo el sur de Europa".
Esta iniciativa, la primera ya tangible de hidrógeno renovable en un país mediterráneo, ha sido posible gracias a los fondos europeos. Porque impulsar el hidrógeno verde está entre los objetivos del Parlamento Europeo, que busca que en 2050 las Islas Baleares estén libres de combustibles fósiles.
Fuente: lasexta.com
