Black & Veatch fija su mirada en nuevas propuestas de desalación cada vez más eficientes

A los 3 millones de horas hombre sin accidentes con tiempo perdido, hito transversal en las operaciones de Black & Veatch oficina Chile, se suma una nueva estrategia que la compañía pretende imprimir a sus proyectos de desalinización: la posibilidad de utilizar energías renovables.

 

 

Imagen: Incorporación de las energías renovables y la descarbonización son elementos clave para el desarrollo de nuevos proyectos.

Reporte Sostenible, 6 de abril, 2020

 

Prácticamente ya no hay proyectos que no consideren en su desarrollo, una estrategia sostenible como eje vital y unificador. En la actualidad, cuando hablamos de la variable descarbonización, pensar en energías limpias para el suministro eléctrico de las operaciones es una reacción casi instantánea.

 

La desalación de agua de mar es una actividad que requiere la utilización constante y no menor de energía, por lo que el estudio de fuentes alternativas y renovables para sus procesos, es cada vez más la opción a seguir.

Jean Pereira, gerente de comisionamiento de Black & Veatch.

Así lo piensa Jean Pereira, gerente de comisionamiento de Black & Veatch, quien explicó a Reporte Sostenible que, entre los objetivos que la compañía se ha planteado para un futuro cercano, figura la posibilidad de incorporación de las energías renovables y la descarbonización como elementos clave para el desarrollo de nuevos proyectos.

 

 “Estamos considerando las energías renovables para reducir nuestra huella de carbono, y de hecho, en nuestra cartera de servicios podemos ofrecer apoyo tanto en el área de potencia como apoyo tecnológico para poder lograr esos objetivos”.

Además, el ejecutivo planteó que “todas las personas que hacemos vida en este negocio, desde las empresas de ingeniería como los operadores, tenemos que estar con nuestra visión clara en que, las tecnologías están avanzando; cada vez hay más oportunidad de volver los procesos más eficientes y nosotros definitivamente tenemos que aportar en reducir la huella de carbono, así que nuestra visión tiene que estar apuntando hacia las energías alternativas como una opción fuerte para poder potenciar todos los equipos necesarios para desalar agua”.

 

En el mismo sentido, Pereira sostuvo que en la compañía pretenden brindar “toda la experiencia que tenemos en desalación, pues, el proceso como tal es sencillo pero, a la vez, tiene elementos delicados, así que queremos seguir aportando nuestra experiencia para el crecimiento tanto de la economía chilena como la de Sudamérica”. 

 

 

Los hitos en desalinización

 

El más reciente hito que marcó a Black & Veatch fue la puesta en marcha del proyecto Expansión del suministro de agua de para la planta más grande de las Américas, en la ciudad de Antofagasta, proyecto en el cual la prestigiosa firma de ingeniería se desempeñó como diseñador e ingeniero de comisionamiento, y que consistió en aumentar en 833 litros por segundo (l/s) aproximadamente, la capacidad de desalación de agua de mar de su cliente al norte del país.

Planta desalinizadora en Coloso, Antofagasta.

El hecho es aún más significativo si consideramos todo el trabajo previo que realizó Black & Veatch durante el proyecto original, cuya capacidad fue de 2500 l/s, “anunciado como una de las infraestructuras de desalinización más grandes y complejas de los proyectos realizados en América del Sur”, según consignó el medio especializado Chemical Engineering.

 

La estrategia de la mina más grande de cobre del mundo, que contempló realizar ambos proyectos con Black & Veatch, obtuvo créditos más allá del éxito con que éstos fueron puestos en marcha: el proceso se realizó con cero accidentes con tiempo perdido (ACTP) por parte del contratista, totalizando un récord de 3 millones de horas hombre sin ACTP.

 

Al respecto, Pereira señaló que todos estos acontecimientos han posicionado a la compañía en un lugar destacado, particularmente en la industria minera y de desalación:

“Nos enorgullece mucho haber alcanzado los 3 millones de horas hombre sin ACTP. Nosotros venimos trabajando particularmente en el área de desalación en Chile desde el 2008 a 2013, ahí tuvimos la oportunidad de iniciar el proceso de desarrollo y diseño de la primera planta. Desde ese momento hemos venido haciendo el cumplimiento de una serie de pasos, como ingeniería de detalle, procura, el monitoreo de las actividades de construcción y como responsables de las actividades de comisionamiento. Por el 2016 entregamos los 2500 litros por segundo y ya, más recientemente (en diciembre de 2019), terminamos la etapa de expansión con 833 litros por segundo”.

 

En el mismo sentido, agrega que, para la compañía, la visión de sostenibilidad del negocio parte por la seguridad de las personas, y que durante todas las etapas del proyecto “hemos sido muy cuidadosos de que las personas sigan los procedimientos ya que, en primer lugar, para nosotros lo más valioso es el recurso humano y las cifras así lo demuestran”. | RS