De este tercio, en Chile se recupera sólo un 6% mientras que el promedio de la comunidad europea supera el 50%, habiendo países por sobre el 80 y 90%.
Mejorar la trazabilidad, contar con reportes de recuperabilidad e invertir en tecnología que permita la recuperación total de los residuos de la construcción, son parte de los desafíos para contener esta realidad. Desde Greenrec, la empresa líder en recuperación de residuos de la construcción, explican que por medio del reciclaje, y la valorización, tanto energética como de suelos, es posible lograr el 100% de recuperación y a gran escala. “Para que esta gestión sea eficiente, debemos imitar a países que llevan la delantera, apostando por nuevas tecnologías que permitan procesar y recuperar de forma masiva y efectiva. Sin embargo, para que esta meta se pueda llevar a cabo, la autoridad puede impulsar este camino proactivo y sustentable, que permita a los diferentes agentes adelantarse en este compromiso”, señala Pedro Pablo Larraín, gerente general de Greenrec.
En esta línea, el programa de Corfo, “Construye 2025”, propone una hoja de ruta a largo plazo que impulsa este cambio cultural e invita a diferentes organismos a ser parte de esta meta sostenible. La iniciativa, busca generar una industria más productiva disminuyendo en un 20% los costos de producción; aumentando en un 20% las edificaciones sustentables y disminuyendo en un 30% las emisiones de CO2 al 2030. A esto se suma, la meta en gestión de residuos que busca que de aquí al 2025 el 30% del volumen de los residuos de la construcción y demolición (RCD) se valoricen y el 70% de las obras nuevas con permisos de edificación cuenten con planes de gestión de residuos. Viendo el panorama más allá, al 2035 se espera aumentar estas metas, llevando a que el 70% del volumen de los RCD se valoricen y el 100% de las obras cuenten con un plan de gestión de residuos.
Pero, ¿cómo llevarlo a cabo? En Greenrec implementaron la primera cinta segregadora del país dedicada 100% a escombros, lo que permite maximizar la valorización de residuos en el destinatario, complementando lo que se logre recuperar en la obra, pero sin requerir cambios en su operación. Esta nueva tecnología, segrega los residuos según tipo –metales, plásticos, cartón, madera, entre otros–, para que luego y, acorde a sus características, estos se puedan triturar, compactar y transportar a distintas plantas de valorización, logrando el 100% de recuperación.
A esto, se suman acreditaciones del Green Building Council (GBC), lo que permite a cada empresa obtener certificaciones CVS, CES y LEED las cuales validan los atributos sustentables de cada obra. Greenrec, además, se encarga de entregar el detalle de los indicadores de recuperabilidad y de trazabilidad, registrando incluso comprobantes fotográficos en cada descarga: “Vemos que la industria quiere y está dispuesta a ir mucho más allá del mínimo legal, y fue esto lo que nos impulsó a innovar y desarrollar opciones reales que hoy permiten al sector tomar servicios donde la sostenibilidad y recuperación efectiva se hace viable. Debemos seguir trabajando en esta línea, acompañados de incentivos que impulsen un cambio transversal”, concluyó Larraín.
