Las compañías mineras Los Pelambres y Collahuasi han encontrado soluciones a diferentes desafíos que debían enfrentar sus operaciones en materia de aprovechamiento de recursos hídricos, ambas desarrolladas e implementadas por Resiter Chile.
Una completa revisión sobre el uso de agua en la minería realizó el gerente de la División Recursos Hídricos de Resiter, Cristián Castillo, durante la 3ª Conferencia Sostenibilidad para la Industria Minera, organizada por Reporte Sostenible, en el marco de la antesala al mes de la minería.
El ejecutivo sostuvo que, según estadísticas del Consejo Minero del 2021, el consumo de agua en la minería llegó al 4% del total país, mientras que el sector productivo que más lo utilizó fue la agricultura, con un 72%.
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De ese total, explicó, “en la minería gran parte del agua se reprocesa, 53 metros cúbicos por segundo es agua reprocesada, no es que se consuma, lo que realmente se consume en la minería son 12,4 metros cúbicos por segundo de agua continental y aproximadamente 4 metros cúbicos por segundo de agua de mar”.
Al revisar estos datos, advierte Castillo, se observa “lo eficiente y lo interesante que es la minería en el uso de una fracción de agua muy menor respecto al total de Chile, y como logra reprocesar a tasas altísimas de sobre el 76%”.
Cristián Castillo, gerente de la División Recursos Hídricos de Resiter, durante la 3ª Conferencia Sostenibilidad para la Industria Minera SPIM 2022.
Economía Circular hídrica para la industria minera
Basados en la necesidad de optimizar el uso de recursos hídricos en la minería, Minera Los Pelambres, solicitó a Resiter desarrollar una planta desaladora móvil para su proyecto INCO, el que consistía en enviar agua desde Puerto Chungo hasta la faena minera, ubicada en Chacay, al interior de Los Vilos, Región de Coquimbo.
“Solicitaron a Resiter reprocesar agua que ellos tenían y poder realizar pruebas desde el ducto sin tomar agua de otras fuentes continentales, solo reprocesando el agua que ellos tenían en el puerto, que es con la que se transporta el concentrado; y el agua de relave, que está en término medio de subida hacia la planta”.
La planta de tratamiento de agua tuvo que cumplir con diversas especificaciones: tenía que ser móvil, debía remover sulfatos de cloruros y metales, ajustar el ph, ser versátil para poder tratar dos tipos de agua distinta, generar una producción de 45 m2/h y, adicionalmente, el agua tenía que estar desinfectada, es decir, libre de bacterias oxidorreductoras, con un sistema de captación versátil capaz de extraer agua de distintas piscinas a distintas alturas.
Por su parte, minera Collahuasi debía resolver la generación de 4,8 toneladas al mes de botellas plásticas, equivalentes a 17 toneladas mensuales de CO2 más su transporte.
Resiter propuso implementar surtideros de agua en los distintos campamentos de la compañía, mediante la instalación de recipientes retornables, con lo que se logró reducir la generación de residuos plásticos y emisiones equivalente al ambiente.
“Lo que hicimos fue tomar su sistema de potabilización de agua e incorporar medidores en línea, filtros de partículas, filtros UV y colocar surtidores de agua que permitieran en todo el campamento, eliminar el uso de botellas desechables y utilizar botellas personales de agua, y de esta forma ir un poco más allá optimizando el uso de recursos hídricos y disminuir los residuos”, explicó Castillo.
Revisa los detalles de la conferencia de Cristián Castillo en este enlace.
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