Japón ha probado con éxito un sistema basado en las profundidades del océano que podría proporcionar una forma estable y confiable de energía renovable, según un informe de Bloomberg.
La invención proviene del fabricante japonés de maquinaria pesada IHI Corp. La compañía ha estado desarrollando durante más de diez años una turbina submarina que aprovecha la energía de las corrientes oceánicas profundas.
Toma relevancia mundial Convertidor de Olas en Energía de Meric
La turbina marina gigante llamada Kairyu, parece un avión de 330 toneladas. Cuenta con dos ventiladores de turbina que giran en sentido contrario, están conectados por un fuselaje masivo y funciona flotando mientras se ancla al fondo del mar a una profundidad de 30 a 50 metros (100 a 160 pies).
IHI Corp. tiene planes ambiciosos para ubicar las turbinas en una de las corrientes más fuertes del mundo (la corriente de Kuroshio) y transmitir la energía a través de cables en el lecho marino. La Organización de Desarrollo de Tecnología Industrial y Nuevas Energías de Japón (NEDO) especula que esta corriente podría generar potencialmente hasta 200 gigavatios de energía confiable.
