“Cuando se estaba diseñando MUT, vimos que un proyecto como este podría generar potencialmente 15 toneladas de basura al día. Para evitar este impacto desarrollamos un plan que busca desviar la totalidad de los residuos de rellenos sanitarios. El programa Basura Cero considera una serie de herramientas como, por ejemplo, clasificación de residuos desde el origen, recolección selectiva, eliminación de descartables en áreas comunes y lavado centralizado de vajilla, un biodigestor para el tratamiento de residuos orgánicos, y una integración profunda de todos los locatarios, entre otros elementos”, afirmó Ignacio Ovalle, gerente general de BZero y encargado del programa Basura Cero de MUT.
Puntualmente, el programa de reutilización de Basura Cero, ha evitado la generación de casi una tonelada de basura mensual, y si se proyecta la integración de todos los locales a este sistema, se estima que se pueden llegar a prevenir la generación de más de 50 toneladas anuales, que en el caso de los descartables equivale a más de 500 camiones llenos de basura.
Sobre el tema, Ignacio Ovalle explicó que “el programa de reutilización, además de permitir cumplir la nueva normativa PUSU, resuelve aproximadamente el 15% del potencial de basura asociado a la operación, y junto con otras acciones como el reciclaje, que representa un 30%, y el proyecto del biodigestor para los orgánicos con un 40% -este proyecto además entregará energía al edificio y fertilizante para áreas verdes-. De todas formas, además de toda la innovación que está impulsando Territoria en esta materia, es imprescindible todo el compromiso y esfuerzo de todos los operadores y personas que realizan la gestión de los materiales. Con esto apuntamos a obtener una reducción de más de un 85% de la generación de basura de MUT, que equivalen a dos mil toneladas anuales de residuos”.
Sobre la sostenibilidad en el proyecto, Fernando Flores, Gerente de Arquitectura y Sostenibilidad de Territoria, desarrollador y operador de MUT, comentó que “en todos los proyectos que desarrollamos trabajamos la sostenibilidad como un eje clave, que es fundamental para nosotros. En MUT, desde sus inicios, implementamos el programa Basura Cero. Hemos hecho partícipes a nuestros operadores, locales comerciales y oficinas, y el resultado nos tiene muy contentos y optimistas. Creemos firmemente que no es sólo una práctica ambientalmente responsable, sino también una oportunidad para innovar de manera continua y transformarlo en una acción cotidiana, que ponemos al servicio de los visitantes de MUT y, sobre todo, de nuestros locatarios”.
Ley de plásticos de un solo uso y desechables
Para dar a conocer estas cifras positivas, los representantes de MUT estuvieron acompañados de la Coalición Supera el Plástico, la que se encuentra trabajando por la correcta implementación de la Ley de plásticos de un solo uso y desechables. El 13 de agosto de 2024 comienza a regir una de las obligaciones más importantes de esta normativa: todos los locales de expendio de alimentos no podrán entregar ningún producto descartable cuando el consumo sea dentro de los establecimientos.
“Este es un ejemplo de cómo los objetivos de la ley de plásticos se pueden cumplir”, comentó Cristóbal Correa, director de las Campañas de Contaminación Marina de Oceana en Chile, una de las organizaciones que integran la Coalición Supera el Plástico. “Ver cómo un sistema que promueve la reutilización funciona, no sólo evitando los plásticos de un solo uso y desechables en general, sino que, también avanzando en modelos integrales de gestión de residuos, demuestra de manera concreta que el camino hacia una economía circular es posible”, agregó.
Los desechos de un solo uso corresponden al 75% de la basura encontrada en las playas del país, de acuerdo con cifras de DIRECTEMAR. Una vez implementada esta ley se impedirá la generación de más de 23 mil toneladas de plásticos de un sólo uso en todo Chile, según un estudio publicado por Oceana y Plastic Oceans Chile.
“Esperamos que todo el esfuerzo que ha realizado MUT pueda servir como experiencia y que este tipo de modelos se repliquen a lo largo del país, considerando que tenemos la urgencia de disminuir y evitar la generación de desechos, un problema que estamos viendo cada día en algunas regiones cuyos rellenos sanitarios están colapsados”, señaló Correa.
Cada año se producen 400 millones de toneladas de plástico en el mundo y la mitad de esa producción está diseñada para usarse una sola vez. De ella, menos del 10 por ciento se recicla, estimándose que entre 19 y 23 millones de toneladas terminan en los océanos, ríos y lagos del mundo.
