A través del webinar Camino a la Cero Emisión: Reporte de Progreso de Metas Basadas en la Ciencia, Viña Concha y Toro comunicó que ya en 2020 disminuyó, desde el año base 2017, en un 19% su emisión de gases de efecto invernadero,ubicándose 7 puntos porcentuales por sobre su meta original a 2022. Las emisiones de 2020 correspondieron a 218 mil tCO2e. La reducción por scopes indica que en el ámbito de las emisiones propias (scope 1) y de emisiones indirectas (scope 2) se realizaron iniciativas de mitigación a través de la incorporación de energías renovables en la matriz eléctrica de la compañía, principalmente a través de contratos de compra de energía para instalaciones de gran escala y de la implementación de plantas solares en zonas de viñedos. En relación a las emisiones indirectas de la cadena de suministro (scope 3), la baja en las cifras se ha alcanzado gracias al trabajo realizado con proveedores principalmente de insumos de envases y embalajes, quienes han trabajado en este compromiso de medición y reducción de emisiones desde el año 2011 junto a Viña Concha y Toro.
“Los resultados que hemos alcanzado a la fecha, nos demuestran que hemos avanzado orientados en nuestro camino hacia la descarbonización. Esto es un estímulo para nosotros, que nos impulsa a continuar con los esfuerzos realizados, estimulando a nuestros proveedores y las viñas de nuestro sector a comprometerse con una economía resiliente y baja en carbono. Ese futuro debemos construirlo entre todos.”, comentó Valentina Lira.
El SBT Progress Report 2020 estará disponible en el sitio web de la compañía: www.vinacyt.com. Con la publicación de estos avances, la compañía ratifica su espíritu de liderazgo en prácticas sustentables, ayudando a reducir los riesgos que plantea el cambio climático y demostrando su compromiso en esta materia, el cual se inició en el año 2007.
Viña Concha y Toro se convirtió en 2019 en la primera empresa latinoamericana en contar con metas alineadas con el objetivo de mantener el incremento de temperatura global por debajo de los 1,5ºC. El compromiso es reducir las emisiones absolutas de sus operaciones propias en 55% y las emisiones indirectas de su cadena de abastecimiento en 55% al año 2030, con respecto al 2017, más de la mitad de sus emisiones de año base. Cabe destacar que la compañía además tiene como meta alcanzar las cero emisiones en 2050 y fue la primera empresa en Chile en integrar el programa Race to Zero al alero de la COP25.
Para establecer estos nuevos objetivos de reducción, la compañía trabajó junto a Edge Chile, utilizando el enfoque basado en la ciencia para estimar reducciones de CO2 alineadas con la descarbonización requerida para evitar que la temperatura global aumente más de 1,5°C, objetivo definido por el Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC por sus siglas en inglés).
Sobre Viña Concha y Toro
Más de 135 años marcan el inicio de la gran trayectoria que convirtió a Viña Concha y Toro en una empresa global líder en la industria vitivinícola. Actualmente es el principal exportador de vinos de Latinoamérica y una de las marcas vitivinícolas más importantes a nivel mundial, con presencia en más de 130 países. Sus orígenes productivos en Chile, Argentina y Estados Unidos imprimen a sus vinos carácter e identidad, dando lugar a una gran familia de marcas globales únicas, reconocidas mundialmente por su calidad, innovación y sustentabilidad.
Su sede principal se ubica en Santiago de Chile, posee 12.313 hectáreas de viñedos plantados en los principales valles vitivinícolas de Chile, Argentina y Estados Unidos. A esto se suman 13 oficinas comerciales ubicadas en sus principales mercados alrededor del mundo.
Science Based Targets (SBTi)
Iniciativa conjunta entre CDP, Pacto Global de las Naciones Unidas, el Instituto de Recursos Mundiales (WRI) y WWF, que invita a las empresas a comprometerse a establecer objetivos corporativos de reducción de gases de efecto invernadero, que ayuden de manera efectiva a disminuir el cambio climático. Los objetivos se consideran que son basados en la ciencia si están en línea con lo que la ciencia climática más reciente considera necesario para cumplir con los objetivos del Acuerdo de París.
