Pero las cosas están empezando a cambiar y rápido
Las compañías mineras han visto que parte de la solución radica en aprovechar las energías renovables. La adquisición de energía limpia por parte de los mineros se ha acelerado a niveles sin precedentes en los últimos dos años, ya que la caída en el costo de la energía eólica y solar ha hecho de éste, un camino cada vez más atractivo para descarbonizar las operaciones. La minería ha contratado 5.9GW de energía limpia en la última década, tres cuartos de los cuales se registraron en los últimos dos años.
Los grandes conglomerados han impulsado esta actividad, como BHP, que el año pasado dijo que las energías renovables impulsarán el 100% de sus mayores operaciones de cobre en Chile para 2025. Rio Tinto tiene ambiciones similares, anunciando un plan el mes pasado para invertir US$1.5 mil millones para llegar a cero emisiones de alcance 1 y 2 para 2050.
Un largo camino por recorrer
A pesar de este impulso, la energía solar y eólica siguen siendo solo una pequeña fracción de la energía utilizada por la industria hoy en día. La minería ha sido mucho más lenta en la adopción de energías renovables que otras empresas. Por ejemplo, solo Google ha adquirido más energía limpia que todo el sector minero en la última década.
Los inversores jugarán un papel importante en la aceleración de la actividad. El mercado de deuda sostenible ahora vale más de $ 1 billón, y los principales administradores de activos e inversores institucionales como Blackrock se comprometen a desinvertir en compañías que no están alineadas con una transición baja en carbono. Cada vez más, las compañías mineras tienen que participar en la descarbonización para acceder al capital.
¿Cómo se ve el camino hacia la energía 100% limpia en el sector minero?
La energía solar y eólica son las formas más baratas de nueva capacidad de generación en dos tercios del mundo. Esto significa que los mineros pueden negociar acuerdos de compra de energía a largo plazo fuera del sitio, o PPA, a precios más bajos que la generación térmica. También les permite eludir la volatilidad de los mercados energéticos.
Las PPA son el mecanismo preferido de adquisición de energía limpia para los mineros. Muchos acuerdos están estructurados como los llamados contratos de manga, en los que una empresa de servicios públicos o minorista de energía se retira de una cartera de proyectos de energía limpia para entregar electricidad las 24 horas al día a las minas. Este modelo ha demostrado ser efectivo en Chile, el país líder en energía renovable para minería. Permite que compañías como BHP o Anglo American cumplan con objetivos de energía 100% renovable sin perder confiabilidad.
Alternativamente, la industria minera también puede instalar energías renovables en el sitio en sus operaciones. Dichas compañías podrían ahorrar hasta un 25% de sus costos totales de electricidad al aprovechar la energía solar, eólica o las baterías en el sitio, según los modelos de BNEF. Las energías renovables en el sitio atraerán a las minas donde el acceso a la red o al combustible es difícil, costoso o poco confiable, un tema común en mercados como Sudáfrica, Zimbabwe y Australia.
Fuente, Bloomberg
