Ventisqueros, salmonicultora con más de 35 años de presencia en el país, puso en marcha tres proyectos ligados a la innovación y sustentabilidad utilizando energías renovables, inteligencia artificial y robótica, permitiendo el ahorro en diésel y disminución de la huella de carbono, además de un mejor control de pellets y disminución de residuos en el mar.
El rubro de la acuicultura y la industria salmonera chilena destacan como un referente mundial en exportación de calidad. Según datos del informe ambiental de la Subsecretaría de Pesca y Acuicultura, este rubro es el segundo sector mayor exportador de Chile y nuestro país es el segundo mayor productor de salmones del mundo seguido de Noruega. Esto, sin duda, ha impulsado la implementación de buenas prácticas que estén marcadas por la innovación y sostenibilidad, que no solo benefician al sector, sino que también promueven el cuidado del medioambiente y el bienestar de las comunidades locales.
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En este contexto, Ventisqueros, destaca tres buenas prácticas que actualmente ya son una realidad en Chile y que a su vez son reconocidas a nivel internacional con casos en Noruega y Canadá:
Inauguración del primer centro de cultivo que opera con energía 100% eléctrica de fuentes renovables: La empresa inauguró el primer centro de cultivo de salmones, E-site Ventisqueros, que opera 100% con energía eléctrica renovable. Esta iniciativa representa un importante hito en la industria, permitiendo, importantes ahorros de combustibles fósiles -más de 180 mil litros de petróleo en 21 meses- y una reducción de 427 toneladas de CO2 equivalentes.
Para llevar a cabo este proyecto, Ventisqueros implementó un cable eléctrico submarino que recorre más de 1 kilómetro desde su base en Tubildad, Isla Grande de Chiloé, comuna de Quemchi, y que une la tierra con el centro de cultivo ubicado en el mar. Este cable llega hasta 40 metros de profundidad y transmite la energía, permitiendo el funcionamiento del centro de cultivo. Desde ahí recibe energía limpia de fuentes renovables, tanto solar como eólica, y todo bajo la certificación internacional I-REC.
Se espera ir avanzando gradualmente para que otros centros de cultivo que reúnan las condiciones, puedan operar de esta misma manera
Alimentación de peces a través de Inteligencia Artificial: La compañía se convierte en el primero al utilizar IA para alimentar a los peces en todos sus centros de cultivo. Esta tecnología permite una alimentación más precisa y eficiente, disminuyendo la pérdida de pellets y entregando la cantidad adecuada de alimento según la demanda específica de cada jaula, mejorando el bienestar de los peces y reduciendo el impacto ambiental.
Uso de robots submarinos (ROVs)[1] para la recolección de pescados descartados y la reparación de redes peceras: La empresa ha implementado el uso de robots para la reparación de redes y recuperación de peces muertos. Esta iniciativa ha contribuido a disminuir el uso de servicios de buceos en más de un 90%, mejorando la seguridad de los trabajadores y reduciendo el impacto ambiental de las operaciones.
José Luis Vial, gerente general de Ventisqueros, explica que “con estas prácticas hemos querido dar un paso más en la ruta de la sostenibilidad que esperamos poder seguir replicando a futuro. Por ejemplo, nuestro centro de cultivos que funciona en base a energía eléctrica 100% renovable se une a la planta de procesos y oficinas administrativas que ya cuentan con dicha energía limpia para operar. Esto ha significado años de diseño y trabajo, en equipo y en conjunto con organizaciones y con las comunidades y estamos orgullosos de ir por buen camino”.
Las prácticas que está llevando a cabo Ventisqueros demuestran el compromiso que tiene la industria salmonera nacional con la sostenibilidad y la innovación, contribuyendo al desarrollo económico y social del país. La industria debe continuar trabajando en la implementación de prácticas innovadoras que promuevan un crecimiento responsable y sostenible, asegurando su posición como relevante actor en la producción de salmón.
[1] ROV es la sigla (en inglés) de vehículo de operación remota (Remotely Operated Vehicle)
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