Gobierno francés dispone €4.000 millones para nuevos proyectos de hidrógeno verde

Francia ha preparado un decreto para el lanzamiento de un mecanismo de apoyo con licitaciones que se escalonarán entre 2024 y 2026 por un total de 1.000 megavatios. 

El Gobierno galo prevé lanzar ayudas para fomentar nuevos proyectos que se centran en la producción de hidrógeno generado con energías renovables o con nuclear. Esta inversión millonaria de 4.000 millones de euros compensará la diferencia de precios generado con combustibles fósiles. 

Además, el Ejecutivo galo ha preparado un decreto para el lanzamiento de un mecanismo de apoyo con licitaciones que se escalonarán entre 2024 y 2026 por un total de 1.000 megavatios, explica Le Figaro con una entrevista de Agnès Pannier-Runacher, la ministra de la Transición Energética. "Nuestro plan para la transición energética -indica Pannier-Runacher- pretende acelerar de forma masiva la producción de energías descarbonizadas en nuestro territorio: nuclear, energías renovables e hidrógeno", según recoge Efe. 

Se trata en primer lugar de favorecer la puesta en marcha de plantas de producciónde hidrógeno por electrólisis alimentadas con electricidad renovable o por la que en Francia se llama "baja en carbono", es decir nuclear, una posición que choca con la de otros países europeos, y en particular Alemania y España.

 

Facilidades para los productores de hidrógeno

 

La ministra francesa insiste en que defienden "un enfoque de neutralidad tecnológica sobre estos temas" y recuerda que Francia está haciéndolo valer entre los miembros de la llamada Alianza Nuclear que ha formado con una docena de Estados de la Unión Europea. Los ganadores de las licitaciones recibirán ayudas que en un 70% estarán fundamentadas en criterios de precio, a imagen de lo que se ha hecho en Francia desde hace años para favorecer el desarrollo de las renovables.

 

En concreto, los productores de hidrógeno recibirán compensaciones cuando sus costos por recurrir a las renovables o a la electricidad nuclear sean superiores a los que tendrían con combustibles fósiles. En paralelo, abonarán al Estado la diferencia cuando esos costos sean inferiores. Con esos contratos, que tendrán una duración de 15 años, se pretende garantizar la competitividad ante un diferencial de precios que puede ser muy notable entre el hidrógeno generado con hidrocarburos y el "bajo en carbono", es decir, el renovable o nuclear.

 

La ministra recuerda que ese mecanismo que ya se ha utilizado para impulsar las energías renovables "ha permitido construir una base sólida de producción de electricidad verde con un sector que ahora contribuye positivamente al presupuesto del Estado". También se prevé una prima para los proyectos que se comprometan a suspender la producción de hidrógeno cuando haya una demanda fuerte de electricidad.

 

Fuente: www.lainformacion.com