Con Cerro Pabellón en pleno funcionamiento y el proyecto eólico Cabo Negro en agenda para este año, ENAP está dando realce al uso de las energías renovables no convencionales dentro de su giro. Pero van más allá, puesto que su estrategia sustentable se enmarca en un plan aún más ambicioso: certificar en la norma ISO 50.001.
El 2018 bien podría ser el año de la sustentabilidad y de las energías renovables no convencionales para la Empresa Nacional del Petróleo, ENAP. Con una férrea visión en la optimización y gestión del uso de las energías al interior de la empresa, y el desarrollo de proyectos de fuentes energéticas limpias, ENAP saca lustre a su política de sostenibilidad.
Según argumenta Alfredo Carril, gerente de gas y energía de ENAP, este 2018 deberían completarse al menos otros dos hitos relevantes en esta materia que se unirán a la puesta en marcha de Cerro Pabellón: la ejecución del Parque Eólico Cerro Negro, en Magallanes, y la certificación de la empresa con la norma ISO 50.001.
-¿Cuál es la visión que la compañía tiene sobre las ERNC y eficiencia energética, y cómo pretende incorporarlas en el futuro a su negocio?
ENAP está comprometida con la sostenibilidad. En este sentido, como empresa sabemos que es relevante y necesario avanzar en la diversificación de la matriz y en el fomento de las energías renovables no convencionales (ERNC), principalmente en aquellas zonas a las que todavía las empresas privadas se acercan con timidez. Reflejo de ello, es el Parque Eólico Cerro Negro, en Magallanes, y también nuestra participación en el primer proyecto geotérmico de Sudamérica, Cerro Pabellón. Las fuentes limpias y renovables son una tendencia mundial, y como empresa pública continuaremos evaluando aquellas oportunidades donde nuestra participación agregue valor. Por otro lado, estamos implementando importantes programas de eficiencia energética, y buscamos certificarnos este año en la Norma ISO 50.001, lo que reafirma nuestro compromiso con la mejora continua del desempeño energético de nuestros procesos productivos, en sintonía con nuestro rol de empresa líder en el ámbito de la energía en el país.
-¿Cuáles son las iniciativas más destacadas en ERNC?
Somos parte de la primera central geotérmica de Sudamérica, Cerro Pabellón, que desarrollamos en conjunto con Enel Green Power y que ya se encuentra operando. Esto, en paralelo a la iniciativa del parque eólico en Magallanes y a otros proyectos que están en etapa de estudio y evaluación de prefactibilidad.
-¿Cuál es la proyección económica que ve a este tipo de proyectos?
En Eficiencia Energética, los proyectos se pagan con los ahorros que se producen, y en el caso de las ERNC, se ha observado que, con el tiempo, las proyecciones económicas y de retorno son cada vez más favorables. ENAP mantendrá el interés en evaluar proyectos que muestren esas condiciones positivas, y estamos convencidos de que la sostenibilidad es un camino necesario para ser cada vez más rentables.
-Sobre el proyecto Parque Eólico Cabo Negro ¿cuál es su estado actual y qué avances esperan en el mediano plazo?
El proyecto parque eólico Cabo Negro, contempla la instalación de tres aerogeneradores que suman una capacidad instalada de 9,9 MW, y tiene por objetivo aportar en la diversificación del sistema energético de Magallanes, aprovechando el potencial eólico de la zona. Este proyecto aumentará de un 2% a un 18% la participación de Energías Renovables No Convencionales (ERNC) en su matriz, lo que la configuraría como la región con mayor presencia de renovables en su sistema eléctrico. Actualmente, las autorizaciones requeridas para el financiamiento de este proyecto se encuentran en su etapa final y, de resultar favorables, permitirían iniciar la ejecución del proyecto dentro de este año.
-¿Cómo evalúa la compañía los avances que han obtenido en materia energética en la región de Magallanes, y qué nuevas acciones están desarrollando al respecto?
Como empresa pública de energía, nos interesa articular soluciones energéticas para el país. ENAP nació en Magallanes, y como consecuencia, tiene un fuerte compromiso con la región. Por eso, creemos que diversificar la matriz es una necesidad regional, ya que permitirá disminuir la dependencia de los hidrocarburos e impulsar energías limpias y renovables en una zona que no puede seguir dándose el lujo de desaprovechar todo su potencial energético. Este proyecto si bien será liderado por ENAP, será de y para la Región de Magallanes, por lo que esperamos seguir contando con la colaboración y el apoyo de las autoridades locales.
-¿Cómo ha evaluado la comunidad este proyecto?
La comunidad de Magallanes en su mayoría ha tenido una excelente recepción de este proyecto, dado que permitirá incorporar a su matriz energética un recurso renovable y ampliamente disponible en la región, como es el viento. Generar energía con este recurso natural estaba en el inconsciente colectivo de la región, tal como lo han manifestado los habitantes en diversas instancias, y fue justamente eso lo que impulsó a ENAP a convertir ese sueño en realidad por medio de este proyecto eólico.
-¿A qué nuevos beneficios podría acceder la comunidad con la implementación de Cerro Negro?
Los beneficios para la comunidad de concretar este proyecto eólico son evidentes. Primero, permitirá reducir la alta dependencia de los hidrocarburos en la producción de energía eléctrica, que hoy depende casi exclusivamente del gas natural, teniendo como respaldo el diésel.
Segundo, les dará la opción de contar con una fuente alternativa de producción de electricidad, y ante cualquier problema en el suministro de gas, la energía eólica contribuirá a disminuir la dependencia del diésel como respaldo. Tercero, el parque eólico reducirá las emisiones de gases de efecto invernadero, lo que mejorará la calidad de vida de las personas y del planeta; y finalmente, podría generar un beneficio tanto para los habitantes de la zona urbana como rural, que son abastecidos desde el sistema eléctrico de Punta Arenas. | RS
Reporte Sostenible
Últimas Publicaciones
Ediciones Especiales