Como una alternativa a los sistemas financieros tradicionales para empresas que han visto copada su capacidad de adquisición o de liquidez, la compañía Nuevo Capital diseñó un instrumento que permite financiar negocios de distinta envergadura sin la necesidad de adquirir nuevas deudas o perder un proyecto por falta de recursos inmediatos.
Se trata de Tech Factor, un modelo de negocio que permitió rescatar durante el 2016, alrededor de 15 millones de dólares en negocios que contaban con órdenes de compra, pero que el distribuidor o desarrollador del proyecto no podía ejecutar por no tener los recursos para adquirir los equipos o materias que le solicitaba su cliente final.
Según explica Ricardo Vidal, Gerente de División Tech Factor y Leasing de Nuevo Capital, “lo que está pasando en la actualidad es que las empresas están recurriendo a nosotros porque tienen problemas con sus proveedores (o mayoristas)”.
“Entonces, lo que sucede es que cuando el distribuidor necesita más crédito, por sobre el monto asegurado, el mayorista decide no seguir vendiéndole hasta que el distribuidor cubra su crédito inicial. En estos casos, el distribuidor, pese a tener una venta asegurada con orden de compra en mano, perdía el negocio por ver copada su capacidad de crédito frente al mayorista”.
Fue ante estos reiterados sucesos que Ricardo Vidal desarrolló Tech Factor, instrumento que consiste en hacer posible que el distribuidor pueda comprar al mayorista para luego poder cumplir con los requerimientos de su cliente final, cerrando de esta manera el negocio.
“Lo que hacemos es una promesa, entre el distribuidor y el mayorista, de modo que cuando el distribuidor entregue el producto a su cliente final, ceda a Nuevo Capital la factura y sea esta institución la que se encargue de pagar dichos equipos al mayorista, el mismo día de su entrega.
Al distribuidor le anticipamos su margen de la operación cobrándole el interés que se genera entre la fecha de entrega de los equipos y la del cobro de la factura. Posteriormente, nosotros nos encargamos de cobrar la factura al cliente final en el plazo que el distribuidor nos indique, normalmente entre 30 y 60 días. Es decir, un negocio que no tenía ninguna posibilidad de concretarse desde el punto de vista crediticio, nosotros lo hicimos posible dándole margen financiero al distribuidor, quién pasa a ser cliente de Nuevo Capital”, añade el ejecutivo.
-¿Qué tipo de clientes pueden optar a este instrumento financiero?
Pueden optar todos los distribuidores que posean un cliente final solvente con un comportamiento de pago positivo y de bajo riesgo. Si el cliente final tiene una referencia de pago compleja o refleja un nivel de riesgo elevado, la compañía rechaza la orden de compra y no se cursa esta alternativa.
-¿Cómo se aplica este modelo al mercado de las energías renovables?
Exactamente de la misma forma que para otros productos. Hemos hecho negocios con clientes que tienen su primera factura, incluso con emprendedores…
Estamos concentrados actualmente en tecnología, pero también nos hacen mucho sentido las energías renovables, ya que en muchos casos son los mismos proveedores importantes que se diversifican en esas áreas, como Siemens por ejemplo, que desarrolla una gran variedad de tecnología electrónica, computacional y también para la industria de energía, y por lo tanto también lo vamos a poder ayudar en este tipo de negocios, va a poder vender más. Y en el caso de los proveedores, algunos con una situación financiera interesante y otros no tanto, le damos la tranquilidad de que si le llega una orden de compra demasiado grande, no la va a perder por falta de financiamiento.
Nuevo Capital es una compañía orientada a dar facilidades financieras con sus productos de factoring, leasing operativo, crédito automotriz y Tech Factor; y está presente en el mercado nacional desde mediados del 2013. | RS
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