2021 será el año clave en que Viña Concha y Toro alcanzará su desafío de abastecerse en un cien por ciento de energías renovables. El hito será producto de la estrategia energética que la compañía (principal productora y exportadora de vinos en Latinoamérica, y una de las 10 más grandes del mundo), viene desarrollando desde 2015.
La estrategia considera, entre sus principales focos, una alianza con el Centro de Innovación Fraunhofer Chile, con quienes colaboran para avanzar en proyectos de innovación tecnológica que les permitan avanzar hacia una matriz energética sustentable y descarbonizada, considerando las fortalezas tecnológicas de dicho aliado clave.
Una de estas alternativas, que destaca por su vanguardia en la industria vitivinícola, es el avanzar en la factibilidad de utilización de hidrógeno verde en algunos procesos de transporte, los que se comenzarán pronto a evaluar, junto a la colaboración con otros actores locales del mundo de la energía.
Al respecto, Valentina Lira, subgerente de Sustentabilidad de Viña Concha y Toro, explica que luego de concluir la etapa de energía eléctrica, asegurando que todo el abastecimiento sea renovable, analizarán otras alternativas de energía. “De ahí en adelante estamos pensando en avanzar con las fuentes móviles dentro de nuestras instalaciones, de manera que se reemplace ese tipo de combustible por energía eléctrica de origen renovable. Donde no se pueda realizar de esa forma, como en flotas de desplazamiento, la idea es comenzar a probar técnica y económicamente el uso de fuentes alternativas de como combustible, sin descartar el uso de, por ejemplo, biocombustibles que también puedan ser probados dentro de nuestras instalaciones”.
En este sentido, el propósito de la alianza con Fraunhofer, es aprovechar la experiencia y estudios que el Centro de Innovación ha desarrollado en el mundo, para asesorarse en distintos campos de innovación energética sustentable, con la finalidad de traerlos para realizar pilotos dentro de la compañía, con miras a su futura implementación a escala mayor.
La compañía se ha embarcado en este camino renovable de manera firme y decidida. Ello también obedece a que en el año 2019, la viña se transformó en la primera empresa chilena y latinoamericana en establecer su meta de reducción de emisiones utilizando la metolodogía de la Iniciativa por Metas Basadas en la Ciencia (Science Based Targets Initiative – SBTi), generando un compromiso público de reducir 55% sus emisiones de CO2 al 2030 y alcanzar cero emisiones la 2050.
Revise la entrevista completa de Valentina Lira, en la Edición Especial de Descarbonización, aquí.
