Según los propios cálculos de Antofgasta PLC, en 2020 dos tercios de sus emisiones de GEI por combustión de diésel fueron atribuibles a sus camiones de transporte de minas. Como tal, la compañía busca ser uno de los primeros en adoptar tecnología que reducirá drásticamente estas emisiones o las eliminará por completo.
El trabajo para cambiar los camiones de diésel a hidrógeno debe dar un gran paso adelante y una alternativa que la compañía está buscando es con el Consorcio HYDRA, compuesto por Antofagasta Minerals, la multinacional de energía Engie, el grupo de expertos minero australiano Mining3, CSIRO Chile y Mitsui & Co. entre otros, que probará un sistema de propulsión de tren motriz de pila de combustible y batería en la mina Centinela de Antofagasta. Según Andrés Alonso, gerente de Recursos Hídricos y Energéticos del Grupo, la expectativa es tener el primer prototipo HYDRA en funcionamiento durante el segundo trimestre de 2022. Las pruebas permitirán a la empresa evaluar el comportamiento y desempeño del tren motriz en condiciones reales de mina, incluyendo a gran altura con polvo en suspensión. También ayudará a establecer protocolos técnicos y de seguridad para el uso de hidrógeno a escala en la minería, que será vital para el despliegue exitoso del combustible.
De todas las operaciones de Antofagasta, Centinela es la que más diésel consume, operando unos 120 camiones de acarreo de mina y explotando desde seis tajos abiertos, según Benjamin Pieper, gerente de Mantenimiento de Minas y Concentradores de Centinela. “Con seis fosas, tenemos una operación muy dinámica, y debido a esa dinámica puede ser difícil electrificar algunas máquinas. HYDRA, un piloto de un prototipo escalable, es un proyecto innovador que reafirma nuestro compromiso constante con la sostenibilidad, especialmente en materia ambiental”, dice, destacando el grupo diverso de participantes en el Consorcio HYDRA.
“Nos estamos preparando para cuando llegue la disrupción tecnológica, en cualquier forma que se presente”, señala Alonso. “Estamos introduciendo sistemas de asistencia de troles eléctricos en Los Pelambres, hidrógeno verde en Centinela y camiones a batería en Antucoya. También estamos negociando con los proveedores de camiones de transporte para ver qué tecnologías pueden ofrecernos cuando llegue el momento de renovar nuestras flotas”.
En cuanto a las emisiones de Alcance 3, la división Transporte de Antofagasta juega un papel clave en el apoyo a la actividad económica de la Región de Antofagasta a través de sus servicios de carga ferroviaria que conectan las operaciones mineras con los puertos de la costa del Pacífico. Podría convertirse en la primera empresa de transporte de carga de Sudamérica en contar con locomotoras a hidrógeno. El proyecto, que requeriría una modernización de su actual flota de locomotoras, se está desarrollando en conjunto con el Acelerador de Hidrógeno Verde de la Agencia de Sostenibilidad Energética de Chile. “La idea que estamos analizando es tener un piloto en funcionamiento, con una locomotora operando con hidrógeno verde, en los próximos dos o tres años”, dice Alonso.
“Esto es muy importante porque el ferrocarril brinda servicios al Grupo ya otras empresas mineras de la Región, todas las cuales tienen como meta la reducción de emisiones. El avance de la división de Transporte en el uso del hidrógeno verde podría representar una importante reducción de emisiones, tanto para el propio servicio ferroviario como para las empresas mineras a las que presta servicios”, añade Aguilar. “Como Grupo, vemos claramente esto como una posible forma de reemplazar el diésel para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero”. En otra iniciativa relacionada con las emisiones de Alcance 3, Antofagasta acordó participar en la evaluación de factibilidad de HyEx, un proyecto liderado por la multinacional energética Engie y una empresa chilena de explosivos, Enaex, para producir amoníaco verde en el norte de Chile. Como posible comprador de HyEx, Antofagasta usaría amoníaco o nitrato de amonio, que se usa para voladuras en la industria minera. El amoníaco también podría servir potencialmente como combustible para trenes, camiones de transporte y barcos.
Fuente: Im-mining.com
