Para que este combustible sintético sea carbono neutral, la intensidad de las emisiones para su producción debe ser menor a las emisiones del combustible fósil que reemplazará.
De esta forma, y en el marco de la Energy Partnership Chile-Alemania, iniciativa de alto nivel entre los Ministerios de Energía de ambos países, implementada en Chile por GIZ, se encargó un análisis sobre la captura de carbono para conocer su estado del arte y revisar las posibilidades de utilizarla para la producción de combustibles sintéticos en Chile.
En el estudio se indica que el CO2 puede ser capturado de diversas maneras. Como directamente de la atmósfera, desde fuentes biogénicas, tales como la combustión de biomasa, o procesos de fermentación industriales, o bien desde fuentes industriales inevitables, las cuales no pueden ser reemplazadas por una alternativa menos emisora, ya que no existe, no está disponible, o la alternativa tiene un potencial limitado. En todos los casos, el CO₂ utilizado volverá a la atmósfera sin causar un incremento de éste, para ser considerado como neutral.
Rainer Schröer, director del Programa Energías Renovables de GIZ, indica que “las condiciones de Chile para ser líder en la producción de hidrógeno verde lo habilitan también para pensar en nuevas industrias como es la producción de combustibles sintéticos carbonos neutrales, por lo cual encargamos este estudio que analiza diferentes tecnologías para que sean considerados por los proyectos que se instarán en Chile”.
Tecnologías
A la fecha las tecnologías más avanzadas a nivel mundial para la captura de carbono son la absorción y adsorción química, y la separación física. Otras tecnologías disponibles también son las membranas y la separación criogénica.
En el caso de la captura de CO2 desde el aire, las alternativas se dividen en absorción química a alta temperatura y adsorción química a baja temperatura. Mientras que para la captura desde fuentes industriales inevitables se identificó la absorción química como la tecnología de mayor madurez en la actualidad, específicamente su aplicación mediante el uso de aminas.
La selección de la tecnología de captura más adecuada dependerá de múltiples factores, como la concentración de CO2 inicial y final deseada, la presión y la temperatura de funcionamiento, la composición y el flujo de gas, la integración con la instalación original, y los costos asociados al sistema de captura.
Potenciales en Chile
El estudio identificó en Chile a 33 instalaciones, pertenecientes principalmente a los sectores del cemento, maderera y celulosa, las cuales poseen en sus procesos industriales fuentes de emisiones inevitables de CO2 y que son económicamente factibles para realizar la captura de carbono.
Los costos nivelados de captura de carbono actuales se encuentran en torno a los 280 euros la tonelada de CO2, en base al estado actual de madurez tecnológica y la escala del proyecto.
Estos valores dependen fuertemente del costo de la electricidad y la disponibilidad de calor residual a partir de procesos adyacentes. Sin embargo, los costos para futuros proyectos a escala comercial pueden bajar al orden de 75 a 113 euros la tonelada de CO2, señala el documento.
Webinar
Los detalles del estudio serán presentados el 27 de julio en el Webinar "Tecnologías de captura de carbono y su potencial en Chile".
