Difícil se hace pensar en la actualidad, que algún nuevo proyecto, proceso o desarrollo en alguna esfera productiva del país, deje de considerar la inclusión de energías limpias y eficiencia energética.
Por cierto, tampoco lo es en el caso de la industria minera, la cual ha ido adquiriendo el apellido de “verde”, debido a la incorporación de nuevas tecnologías sustentables que se utilizan en la cadena productiva de sus efectos, con lo que se lograría una trazabilidad que la podría identificar con un sello distintivo.
Para alcanzar esta trazabilidad, las exigencias se hacen extensivas también a los grandes proveedores industriales y mineros, los que han debido orientar sus esfuerzos en desarrollar nuevos productos e implementar políticas que cumplan con estos estándares.
Ejemplo de lo anterior se evidencia en las nuevas directrices que estas empresas están adoptando en materia de sustentabilidad, y que han ido incorporado paulatinamente en sus procesos para satisfacer las exigencias de sus clientes, tal como lo explican desde la compañía tecnológica ABB, cuya estrategia busca incorporar equilibrio entre el desempeño económico, la gestión ambiental y el progreso social para beneficiar a todos los integrantes de la cadena de valor.
“La sustentabilidad forma parte de la estrategia corporativa y del éxito empresarial de ABB. Los principios de sustentabilidad son incorporados desde cómo se desarrollan y producen los productos de eficiencia energética y el suministro de materiales, hasta el reciclaje al final de la vida útil y la eliminación de residuos”, señala Jorge Abraham, gerente de Minería & Industria de ABB en Chile.
Para ello, agrega, han creado valor al fabricar y suministrar productos, sistemas y soluciones de energía y automatización de eficiencia energética a sus clientes en servicios públicos, industria, infraestructura y transporte, lo que hace que sus operaciones sean más eficientes en el uso de la energía y reduzcan su impacto ambiental.
